Poeta desde las sombras

 Pues... estoy escribiendo un poema al día. Porque desde hace muchísimo tiempo me gusta escribir poesía y la verdad es que hice mucha cuando estaba en secundaria. Me encantaba todo ese rollo y, de la noche a la mañana, lo dejé porque consideraba que era estúpido, que no tenía talento y que mi poesía apestaba.

Bueno, pues sigo pensando que mis poemas no son muy buenos pero estoy escribiendo uno al día porque me gusta y porque... no, ya está, solo porque me gusta. No espero que me digan que son buenos o que me den un like por ellos o incluso un premio. Puede que algún día me dé por publicar los más decentes (creo que los tengo que editar... en plan, son mejorables. ¿La poesía se edita? ¿Hay algún poeta entre mis lectores que me pueda responder a esta pregunta?) pero no espero nada del otro mundo. Bueno, mentira. Espero que haya quien los lea, jajaja

Aunque esa es mi mini-ambición con todo lo que publico, ¿no? No es ganar dinero, ni volverme famosa ni nada de todo eso. Solo quiero que me lea tanta gente como sea posible :3 Con eso ya me doy por satisfecha.

Lidia me dijo que a lo mejor era la siguiente Gloria Fuertes pero ni siquiera aspiro a eso. Sobre todo porque todo lo que estoy escribiendo ahora de poesía es más bien... ¿Cómo explicarlo? Es para aliviar una pequeña parte de mí que susurra desde la oscuridad. ¡Já! Mi propio Janus. Supongo que el escribir, la poesía y todo eso no deja de ser una forma de dejar de oír voces en la oscuridad.

Espera, eso ha sonado más creepy de lo que pretendía. Están las historias de lo que veo al otro lado del velo, luego las de las voces en la oscuridad y después las mías, las de autoficción. Me estoy yendo por las ramas.

El día que publique mis poemas, os aviso. Pero ya os digo que soy más bien mediocre :3

Eso sí, ahora en mi lápida podrán poner: Ikana. Escritora y poeta. ¡Chúpate esa, zorro espacial!

¿Qué hora es?

Me cuesta horrores despejarme por las mañanas. A pesar de que me gusta levantarme temprano para aprovechar el día, a mi cuerpo le cuesta todo eso de despejarse, de estar activo y tal. Necesito alrededor de un par de horas para sentir que me he quitado las telas de araña de la cama y empezar a pensar con claridad. Esto a veces es un rollo patatero porque me gusta escribir en las primeras horas, cuando el vecindario no se ha puesto en modo Abeja laboriosa, mis bichos están durmiendo (todo lo que no han dormido la noche anterior) y hay una especie de calma chicha en el aire.

¿No os pasa con las primeras horas de la mañana, cuando te levantas relativamente temprano? Mejor no hablamos de cuando son las cinco. No han puesto ni las calles, jajaja Pero está esa tranquilidad en el aire, como si el mundo no se hubiera despertado del todo y solo unos pocos sí, compartiendo la paz antes de la tempestad. Me parece un concepto de lo más curioso.

Parece que el calorcillo de la primavera va cogiendo carrerilla, aunque esta mañana hacía bastante fresco cuando sacábamos a los dinos. Menos mal que salí con chaqueta abrigada o me habría congelado. Los pájaros (mirlos y colirrojos) estaban en su salsa de trinos matutinos. Me pregunto cómo será despertar en el bosque. 

Pero me estoy yendo por las ramas. 

Me cuesta mucho despertarme por las mañanas. Necesito café muy temprano. Espero no ser la única pringada que le pasa jajaja

Una lista de cosas

Tengo una lista muy emocionante de proyectos que quiero llevar a cabo. De cosas que quiero escribir, principalmente. Hay un batiburrillo de cosas, algunas de ellas bastante experimentales. Dos que me llaman la atención son: escribir una nueva novelette de auto-ficción y escribir una antología de poemas. Del primero aún no he elegido tema (pero estoy barajando un par). Del segundo voy haciendo cada día uno, pero tampoco sin un tema en concreto. Creo que lo hago más por diversión que por... en fin, lo que quiera que sea eso.

Al mismo tiempo, mi capacidad de mantener el foco en algo durante mucho rato sigue estando en el jardín, tomando el sol y oliendo margaritas. Solo hoy me ha venido la inspiración de que, quizá, el problema no solo sea que estoy dispersa, sino que mi cerebro se ha dado cuenta de que puede distraerse sin poner demasiado esfuerzo en ello, que yo le voy a seguir la corriente.

He leído en alguna parte que el cerebro no deja de ser un músculo. Quizá con el cambio de mes, de trimestre y de estación, me haya dejado caer en el "Necesito un descansito" y todavía sigua ahí. No creo que lo esté haciendo de forma consciente tampoco.

Creo que es una mezcla de: cambios de ritmo de trabajo, de horarios, de estación, de mes y de trimestre, duermo y descanso poco, he tenido muchas interacciones sociales y me he olvidado de que necesito realmente descansar durante el fin de semana para el lunes estar a tope de nuevo y que me sea más fácil estar presente en lo que tengo que hacer.

En el fondo, no deja de ser un cúmulo de muchas cosas que juegan en mi contra. Pero la mayoría están fuera de mí. Así que supongo que lo que queda de semana va a ser un: pomodoros muy cortos, descansos breves, recompensas satisfactorias, descansos obligatorios para ayudarme a recuperar el foco de una vez. Especialmente a la hora de escribir, que esquivo como si no hubiera un mañana las primeras quinientas palabras y al final se convierte en una agonía descubrir que llevo cuatro horas haciendo "cosas productivas", pero no he escrito nada.

Huy, este post se me está saliendo de madre.

Vae. Pues eso. Volver a la rutina después de los cambios es difícil, pero no imposible :3 Así quew, voy a seguir intentándolo fuerte, que al final es lo que importa dentro del estoicismo. 

Si me acuerdo, otro día hablamos de eso.

Que tengas un lindo día ^^

Abril, aguas mil

Hemos entrado de lleno en Abril. El mes, en teoría, de las lluvias. A veces creo que las estaciones se han movido de sitio, pero ignoro si hacia adelante o hacia atrás (también es una teoría que tiene mi mae). Con todo esto de que la primavera ha comenzado, llevo un par de días que me está costando mucho concentrarme, sentarme a escribir o incluso a hacer pequeñas tareas (como este maldito post). Mi capacidad de mantener el foco en algo durante más de cinco minutos ha saltado por la ventana y ahora parece que tenga TDAH (ese que parece que está hasta en la sopa). 

Tengo un temporizador puesto mientras escribo, con la esperanza de que jugar a "solo tengo veinte minutos" me ayude a empezar y a decirle así a mi perezoso cerebro que no es tan malo como parece. Eso sí, escribir las 500 palabras de base de #Dragones ya será otro cantar.

No recuerdo si lo mencioné o no, pero he empezado un nuevo proyecto :3 Sigo persiguiendo la novelette porque al final con #Chico se me desmadró el todo.

Solo espero conseguir tachar mis tareas y recuperar mi focus pronto. Iba muy bien con todo esto, estaba progresando :( Seguro que solo es la primavera, que la sangre altera. Los cambios de bioritmos y el estar acostumbrándome a las nuevas horas de luz y todo eso. Necesito tiempo y es solo una fase. Mañana irá mejor ^^

La vida es una tómbola rueda. A veces estás arriba, otras abajo y otras, en medio 🦖